Este término fue acuñado en 1910, para englobar a una serie de artistas que por sus características, no podían considerarse impresionistas aunque todos hubieran pintado en algún momento de su vida obras dentro de ese estilo. No obstante, sus obras de madurez no se pueden etiquetar de forma tan sencilla y además son los precursores de muchos de los "ismos" que aparecen en el siglo XX.
Cézanne, Gauguin y Van Gogh son los postimpresionistas por excelencia, pero también pueden incluirse a Pizarro y Seurat.
Para entender su importancia como avanzadilla, es decir, vanguardia, de lo que iba a acontecer en la centuria posterior nada mejor que observar sus obras.
Pisarro:
Tejados Rojos |
L´Estaque |
La casa del ahorcado |
Seurat:
La parada del Circo |
El circo |
Signac:
El palacio papal en Aviñon |
Gauguin:
Mujeres Tahitianas |
Mujeres tahitianas |
Van Gogh:
Toulouse- Lautrec:
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